Las nuevas herramientas lo cambian todo menos la esencia de lo que somos y hacemos. Siempre hemos explorado, pero hasta que tuvimos un cohete no pudimos explorar otros planetas. Nuestra esencia no ha cambiado con la revolución de las TICs y del marketing digital: se trata de comunicar. Cuanto mejor conozcas las nuevas tecnologías, mejor podrás comunicarte, pero que los árboles del hipertexto no te oculten el bosque del mensaje.
Comunicarse es crear la memoria del corazón
TODO POR LA PASIÓN
Siempre se nos ocurre soñar sin pensar en las consecuencias.
En cierto modo, ahora vemos que con el primer paso del camino de ida iniciamos también el camino de vuelta. Para arrancar a andar hay que ser irreflexivo, audaz, hasta temerario; es durante el viaje cuando lo conectas todo, cuando descubres la magia que va desde el pensamiento de una idea hasta su realización, y eso te va haciendo un poco más sabio. Así que aquí seguimos: en el punto exacto desde el que siempre partimos y en el punto exacto al que siempre volvemos. Nuestra pasión.
ESTILO ELABORADO
Libres para expresar el valor de una idea.
EL ENGRANAJE DE UNA SOLA PIEZA
Objetivo, creatividad, tecnología, conocimiento y resultado.
Cada uno de nosotros viene de un campo concreto, de una especialización, pero preferimos trabajar todo conjuntamente. Nuestra estructura es más horizontal que vertical. Sabemos que la comunicación es un arte holístico, que el resultado final de cada trabajo que hacemos es algo más que la mera suma de las partes que lo componen. Nos gusta lo que hacemos, que es una manera de decir que lo hacemos porque nos gusta. Por eso tenemos el Manifiesto Mr. Addison.
QUÉ HACEMOS
Descubre algo nuevo cada día
EL ORÁCULO
Donde las palabras encuentran sentido
Harry encuentra en sí un hombre lleno de ideas, de sentimientos, de cultura, de naturaleza dominada y sublimada, y a la vez encuentra al lado al lobo, un mundo sombrío de instintos, de fiereza, de crueldad, de naturaleza ruda, no sublimada, fiera, caótica.
Hermann Hesse
El lobo estepario
Antes de que el universo existiera, yo existía. Yo hice los soles y los mundos. Yo creé las vidas y los espacios en los que habitan. Yo las cambio de lugar a mi antojo. Van donde yo dispongo y hacen lo que yo les ordeno. Yo soy el verbo, y mi nombre no puede ser pronunciado.
Philip K. Dick
Ubik
No me gusta el trabajo, como a ningún hombre le gusta, pero sí que aprecio lo que hay en el trabajo, la oportunidad de descubrirse a sí mismo.
Joseph Conrad
El corazón de las tinieblas
No digas que tienes miedo de confiar en tu mente porque sabes tan poco ¿Estás más seguro abdicando ante los místicos y descartando lo poco que sabes? Vive y actúa dentro de los límites de tu conocimiento, y continúa expandiéndolo hasta el fin de tus días. Redime tu mente de la casa de empeños de la autoridad.
Ayn Rand
La rebelión de Atlas
No es el ángulo recto el que me atrae, ni la línea recta, dura, inflexible, creada por el hombre. Lo que me atrae es la curva libre y sensual, la curva que encuentro en las montañas de mi país, en el curso sinuoso de sus ríos, en las olas del mar, en el cuerpo de la mujer preferida.
Oscar Niemeyer
Arquitecto
Estoy al borde del precipicio y mi trabajo consiste en evitar que los niños caigan en él. En cuanto empiezan a correr sin mirar adónde van, yo salgo de donde esté y los cojo. Eso es lo que me gustaría hacer todo el tiempo. Yo sería el guardián entre el centeno.
J. D. Salinger
El guardián entre el centeno
Perder un sueño es como perder una fortuna. Qué digo, es peor. Nuestro pecado es haber perdido nuestros sueños. Sin embargo, hay que ser fuertes y, aunque uno se sienta cansado, decirse: “Estoy cansado ahora, estoy arrepentido ahora, pero no lo estaré mañana”. Esa es la verdad: mañana la vida no puede ser esto.
Roberto Arlt
Los siete locos
Hay, en este estrambótico y embrollado asunto que llamamos vida, ciertos extraños períodos en que el hombre considera al universo todo una simple y enorme farsa, aunque apenas vislumbre en qué pueda consistir la broma y tenga más de una sospecha de que ésta se realiza a su costa.
Herman Melville
Moby Dick
Lo importante –dijo Castel– no es que esta manera de razonar sea o no buena, lo importante es que obligue a reflexionar.
Albert Camus
La peste
En aquel tiempo yo era un adolescente. Apenas tenía dieciséis años y ya no recordaba mi infancia (…) y era tan mal poeta que no sabía llegar al fondo de las cosas.
Blaise Cendras
Prosa del transiberiano y de la pequeña Juana de Francia
Nos movemos con los ojos cerrados y los oídos tapados: derribamos muros en los que hay puertas que esperan ser abiertas al tacto; buscamos a tientas escaleras, olvidando que tenemos alas; rezamos como si Dios estuviera sordo y ciego, como si estuviese en un espacio. No es de extrañar que no reconozcamos a los ángeles que andan entre nosotros.
Henry Miller
Nexus
Nada impide oír tanto como estar oyendo a la vez dos cosas, dos voces; nada impide tanto entender, como la simultaneidad de dos o más personas que hablan sin guardar su turno.
Javier Marías
Corazón tan blanco
